
Bullrich prometió indemnizar a las víctimas de un ataque montonero en Formosa
Patricia Bullrich prometió indemnizar a las víctimas de un ataque montonero registrado en Formosa hace 48 años.
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Patricia Bullrich prometió indemnizar a las víctimas de un ataque montonero registrado en Formosa hace 48 años.

“Es nuestro profundo deseo que encuentren paz en sus almas y que tanto dolor encuentre en parte alivio al ver concretada la compensación en marcha para soldados y heridos” enfatizó.

A principios del Siglo XX se remontaba el Río Bermejo con chatas de bajo calado para establecer “líneas militares”. Distintas guarniciones de Caballería eran dejadas próximas a su orilla norte, para desde allí reconocer e ir ocupando el territorio, tratando de alcanzar el Pilcomayo. Esto permitiría luego asegurar el territorio para permitir la construcción del ferrocarril y el posterior poblamiento y desarrollo económico del entonces territorio nacional.

Mientras el país muestra una recuperación en sus exportaciones, el nordeste argentino continúa rezagado y Formosa directamente se hunde en el atraso estructural. En los primeros nueve meses de 2025, la provincia apenas generó 36 millones de dólares en ventas externas, casi todas en productos primarios. Un modelo que presume “autonomía” pero ni siquiera produce para vender más allá de su frontera.

El juez federal Pablo Morán volvió a ponerse del lado del poder: bloqueó la presencia de la Dirección Nacional Electoral y habilitó a militantes gildistas para “controlar” los comicios. En Formosa, la Justicia ya no vela por la transparencia: la custodia del voto quedó en manos del régimen.

Sin la Ley de Lemas, sin sobres y sin miedo suficiente, el reino de Insfrán mostró su verdadera desnudez: un poder sostenido por la pobreza y el silencio que empieza a resquebrajarse. La impunidad sigue, pero el mito se rompió.

Con un aumento del gasto público del 37,9% —el más alto del país—, Formosa vuelve a mostrar que su economía depende casi por completo del Estado. Detrás del récord se esconde un modelo político que confunde expansión con progreso y gasto con desarrollo, mientras la pobreza y el atraso estructural siguen intactos.

La estadística como cortina de humo: Mientras se promociona una tarifa eléctrica baja como "logro social", se oculta que el 90% de los formoseños necesita subsidios crónicos para pagar un servicio básico. El relato oficial celebra la dependencia como si fuera un triunfo, silenciando tres décadas de estancamiento que condenan a la provincia a la asistencia perpetua. El verdadero costo no está en la factura de la luz, sino en la factura política de un sistema que produce pobres para luego exhibir su pobreza como mérito propio.