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Remodelaciones

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Pedalear hacia la equidad: Insfrán sigue midiendo la educación por m2 y les habla a niños de seis años sobre narcotráfico

leonardo fernández acosta
Locales22/05/2025

Niños de primaria como decorado, militantes como público real y el recreo escolar como tribuna partidaria. Habló de paranoia política, denuncias delirantes sobre narcotráfico y una meritocracia distorsionada donde la pobreza es glorificada y la épica del “champion roto” ahora disfraza el cinismo de un hipermillonario que aún se presenta como vocero de los pobres.

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    La caja chica del feudo: cómo LLA entregó Vialidad al gildismo sin pudor ni vergüenza

    leonardo fernández acosta
    Locales23/05/2025

    La caja chica de Vialidad vuelve a abrirse con moño azul. Mientras Javier Milei brama en conferencias sobre la “casta política”, en Formosa su partido pacta con lo más rancio del aparato feudal. La salida forzada del ingeniero Víctor Padilla de la jefatura de Vialidad Nacional es un caso paradigmático: se va un funcionario que mantuvo operativa la estructura vial con escasos recursos y entra Hernán Ramis, un cuadro del gildismo reciclado por la vía rápida de la impunidad.

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    El gaucho del rebenque fácil y el corazón flojo: Brignole, valiente con mujeres de la oposición, cobarde cuando aparece el Ejército

    leonardo fernández acosta
    Interior29/05/2025

    El intendente Mario Brignole juega al macho montado con rebenque en mano para amedrentar a la oposición, pero tiembla de miedo cuando el Ejército anuncia maniobras en su camping. Gaucho para agredir mujeres, pero cobarde cuando no controla los uniformes. La síntesis perfecta del modelo formoseño: bravuconería para los débiles, sumisión ante el poder real.

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    Acto del PJ, una humillación en cada elección: el disfrazado viaje a la esperanza con destino final en la dependencia

    leonardo fernández acosta
    Opinión31/05/2025

    Los trasladan como ganado, pero les prometen libertad. Viajan en un camión volcador hacia un acto político, creyendo que participan de la democracia, cuando en realidad son piezas de un sistema perverso que los condena, una y otra vez, a votar por quienes los mantienen pobres, dependientes y callados. No es una movilización: es una humillación institucionalizada.