
"Buenos muchachos": hoy funcionarios, ayer patoteros organizando desalojos
Una denuncia que involucraría al Director de Radio Nacional, desalojando con patotas un terreno, salpicaría al Concejal Hugo García y su hermana.
Una denuncia que involucraría al Director de Radio Nacional, desalojando con patotas un terreno, salpicaría al Concejal Hugo García y su hermana.
Definitivamente el fiasco poco transparente de la inscripción, hace que salgan a la superficie, años de corrupción en el IPV, con testigos de concreto, vacíos, abandonados, saqueados, perdidos en la maleza y como contraparte, miles de familias que nuevamente engañadas pierden las esperanzas de tener una vivienda social, algún día.
Nada nuevo bajo el sol porque hay hasta jueces habitando viviendas del IPV, pudiendo tranquilamente acceder a créditos hipotecarios, más aún en el caso de Marcelo Sosa, que trabaja en un banco privado y que aparte se hace de fondos extras en las más de cinco campañas que ha realizado como candidato y que no ha ganado una sola.
Ocupó cargos, pidió favores, posó con los jefes del régimen. Hoy se presenta como opositora, niega su pasado y amenaza a periodistas que lo recuerdan. No cambió de ideas: cambió de estrategia. Y cuando se le agotan los argumentos, recurre a lo que mejor aprendió del modelo que ahora critica: el apriete.
En uno de los discursos en donde el gobernador reescribió la historia poniendo a San Martín en la destitución de la primera Junta (llegó dos años después) también habló de 320 hornos, arrabio verde, polos tecnológicos y millones en inversión privada. Todo menos progreso real. Mientras el gobernador habla de industrias de vanguardia, la provincia sigue atrapada en el atraso. El humo no es del carbón: es del relato
A tres años del intento de copamiento institucional en la UNaF, los responsables siguen impunes, dictando cátedra sobre valores que traicionaron. La universidad debe elegir: o activa su memoria y defiende su autonomía, o se resigna a ser un apéndice más del poder político.
La Policía de Formosa volvió a actuar como sabe: con opacidad, despliegue excesivo y nulo respeto por la transparencia. Mientras intenta descalificar al periodismo que investiga, se hunde en un descrédito irreversible, marcado por el historial de causas fraguadas, testigos falsos y operativos turbios. Nada en su versión oficial resiste el menor análisis. Y ya nadie les cree una sola palabra.
Otro papelón libertario: mientras reparten discursos sobre la "libertad", usan fotos ajenas sin permiso y fabrican apoyos donde no los hay. El candidato Gripaldi quiso sumar a un empresario que ni lo deja entrar a su negocio.