
Hubo acuerdo y ACLISA seguirá atendiendo a afiliados del IASEP
Ayer por la tarde hubo un ofrecimiento de la intervención de la obra social estatal que hizo que quedara sin efecto la decisión de cortar los servicios de salud privado el día lunes.
Ayer por la tarde hubo un ofrecimiento de la intervención de la obra social estatal que hizo que quedara sin efecto la decisión de cortar los servicios de salud privado el día lunes.
"Queremos metodologías claras de trabajo y la última nota que mandamos todavía no contestaron respecto de si mandamos las pruebas o los pacientes. El espíritu en ACLISA es seguir trabajando con el IASEP y llegar a un acuerdo razonable" afirmaron.
De darse esta situación de abandono de los afiliados confinándolos a ser atendidos en hospitales pero además cobrándoles la orden médica y las prestaciones, el estado estaría utilizando recursos públicos en los nosocomios pero cobrándolos como si fueran privados.
La iniciativa ciudadana fue motivada por la dramática situación de abandono y desprotección de los afiliados de la intervenida Obra Social de los empleados públicos de la Provincia de Formosa, indicaron.
El afiliado deberá llevar las muestras para el análisis histopatológicos a las oficinas administrativas de la obra social para que después vuelvan a ser trasladadas a los laboratorios que correspondan.
Enzo Casadei y Julieta González denunciaron la estafa de la Obra Social y el robo a los empleados estatales de Formosa, que no pueden optar por otra obra social más eficiente, porque están obligados a afiliarse, aportar y sufrir descuentos compulsivos de una obra social, que no administran porque esta hace décadas esta vitaliciamente intervenida por el gobierno de Gildo Insfran.
A partir de ahora y debido a la decisión de los especialistas en anatomía patológica de no atender más por los bajos pagos de la IASEP, los análisis se harán en el Hospital de Alta Complejidad y La Madre y El Niño.
Los referentes de los nucleamientos médicos, laboratorios, clínicas, lejos de obtener una respuesta que oriente la negociación a buen puerto obtuvieron una respuesta, más con olor a extorsión y amenaza, que a una solución aún si esta solución pulveriza el objeto de la propia existencia del IASEP y los millones que todos los meses descuenta a los afiliados. "Los hospitales públicos están preparados para dar una adecuada atención a los afiliados del IASEP" habría sido la respuesta.
La pésima administración del interventor, Claudio Samaniego, ocasiona cada vez más recortes a la obra social que más afiliados tiene en la provincia.
Entre todos los recortes, la de los honorarios ha causado que la mayoría de los odontólogos no atienda con la obra social o cobre en efectivo los tratamientos. En setiembre otro servicio médico vital entraría en conflicto, el de los anestesiólogos.
Los trasladan como ganado, pero les prometen libertad. Viajan en un camión volcador hacia un acto político, creyendo que participan de la democracia, cuando en realidad son piezas de un sistema perverso que los condena, una y otra vez, a votar por quienes los mantienen pobres, dependientes y callados. No es una movilización: es una humillación institucionalizada.
Ocupó cargos, pidió favores, posó con los jefes del régimen. Hoy se presenta como opositora, niega su pasado y amenaza a periodistas que lo recuerdan. No cambió de ideas: cambió de estrategia. Y cuando se le agotan los argumentos, recurre a lo que mejor aprendió del modelo que ahora critica: el apriete.
En uno de los discursos en donde el gobernador reescribió la historia poniendo a San Martín en la destitución de la primera Junta (llegó dos años después) también habló de 320 hornos, arrabio verde, polos tecnológicos y millones en inversión privada. Todo menos progreso real. Mientras el gobernador habla de industrias de vanguardia, la provincia sigue atrapada en el atraso. El humo no es del carbón: es del relato
A tres años del intento de copamiento institucional en la UNaF, los responsables siguen impunes, dictando cátedra sobre valores que traicionaron. La universidad debe elegir: o activa su memoria y defiende su autonomía, o se resigna a ser un apéndice más del poder político.
La Policía de Formosa volvió a actuar como sabe: con opacidad, despliegue excesivo y nulo respeto por la transparencia. Mientras intenta descalificar al periodismo que investiga, se hunde en un descrédito irreversible, marcado por el historial de causas fraguadas, testigos falsos y operativos turbios. Nada en su versión oficial resiste el menor análisis. Y ya nadie les cree una sola palabra.