"Me dolió porque conozco a Patricia Arguello desde hace 20 años, y es la docente que me recibió en 2019 cuando yo era candidato a gobernador en su escuela, y por eso le habían hecho un sumario administrativo, hasta hace una semana atrás criticaba la resolución (del ministro de Cultura y Educación de la provincia, Luis) Basterra por la que permiten pasar a los chicos con hasta 19 materias previas, decía que eso no iba más, que es inaudito y ahora, bueno, tenemos que explicarles a la gente que se ha ido con el oficialismo", señaló Bogado.
Locales28/05/2022
leonardo fernández acosta
El diputado provincial, presidente y fundador del partido Nuevo País, titular del bloque de Floro Eleuterio Bogado en la Cámara de Diputados de la provincia de Formosa, Adrián Bogado, habló sobre el pase de la diputada Patricia Arguello al oficialismo. "Conozco a Patricia Arguello desde hace 20 años, es la docente que me recibió en su escuela y a la que le hicieron un sumario por eso, estoy dolido y sorprendido como todos", indicó.
Adrián Bogado, diputado provincial y presidente del bloque Floro Eleuterio Bogado de Nuevo País en la Legislatura, también se pronunció por el pase de la que, hasta este jueves era una integrante más de su bloque, la diputada Patricia Arguello, ahora con el oficialismo.
"Me dolió porque conozco a Patricia Arguello desde hace 20 años, y es la docente que me recibió en 2019 cuando yo era candidato a gobernador en su escuela, y por eso le habían hecho un sumario administrativo, hasta hace una semana atrás criticaba la resolución (del ministro de Cultura y Educación de la provincia, Luis) Basterra por la que permiten pasar a los chicos con hasta 19 materias previas, decía que eso no iba más, que es inaudito y ahora, bueno, tenemos que explicarles a la gente que se ha ido con el oficialismo", señaló Bogado.
El hombre remarcó que "estamos con Gaby (por Gabriela Neme) espalda con espalda, porque esto es señal de que están desesperados y no saben qué hacer, cooptar dirigentes o legisladores lo muestran como algo bueno, cuando está mal. Esto es una gota que se va por una marea que se viene (sic)".
Asimismo, volvió a insistir con que, el gildismo está destinado a desaparecer más pronto que tarde. "Esto se va a terminar, la gente ya no come vidrio, quedó demostrado en las elecciones anteriores", sentenció.
Una auditoría en la ANSES de Clorinda destapó un esquema de jubilaciones irregulares otorgadas a paraguayos, con domicilios falsos y servicios inexistentes. Más que un fraude administrativo, la maniobra muestra cómo el “modelo formoseño” convierte los beneficios sociales en una maquinaria para importar votos y sostener al poder.
Gildo Insfrán y su gabinete juran fidelidad a una Constitución presentada como moderna, mientras acumulan décadas en el poder. Ministros eternos, fiscal obediente y un Poder Judicial ausente consolidan una provincia donde los ciudadanos viven reducidos a un estatus de súbditos y la alternancia democrática es un espejismo.
La reforma constitucional en Formosa no solo exhibió la habilidad de Insfrán para eternizarse en el poder, sino también la fragilidad de una oposición que se vende al mejor postor. El caso Servín desnuda la obscena compraventa de conciencias y la miseria de una política que se alimenta de la necesidad.
Con la Cláusula Transitoria Cuarta, la Convención Constituyente formoseña abrió la puerta para que Gildo Insfrán busque un noveno mandato y Eber Solís un tercero. Una reforma hecha a medida, que desconoce el fallo de la Corte Suprema y dinamita la alternancia republicana: la Constitución convertida en espejo para perpetuar al caudillo
El radicalismo formoseño, entre el canibalismo y la improvisación: en vez de concentrarse en frenar la reelección eterna de Insfrán ante la Corte Suprema, se devora a sí mismo. Ahora incluso le quitaron el poder al Dr. Juan Montoya —el abogado que motorizó la inhabilitación del gobernador antes de la reforma—, en la presentación de una nueva medida judidial y en medio en una interna avalada por su propio hermano, el diputado Miguel Montoya
El gobernador formoseño acusa a Javier Milei de autoritario, pero lo hace con el republicanismo atrofiado tras tres décadas de feudalismo. Señala al otro por concentrar el poder mientras en su provincia la división de poderes es un decorado, la alternancia es imposible y la democracia se reduce a la obediencia al jefe.
Los gobernadores de Provincias Unidas frenaron el apuro de Milei y le bajaron el precio a su convocatoria: acumulan reproches por el maltrato recibido, no están dispuestos a favorecer a un competidor en plena campaña y sienten que el Círculo Rojo empieza a girar hacia ellos como alternativa de gobernabilidad.
El radicalismo formoseño, entre el canibalismo y la improvisación: en vez de concentrarse en frenar la reelección eterna de Insfrán ante la Corte Suprema, se devora a sí mismo. Ahora incluso le quitaron el poder al Dr. Juan Montoya —el abogado que motorizó la inhabilitación del gobernador antes de la reforma—, en la presentación de una nueva medida judidial y en medio en una interna avalada por su propio hermano, el diputado Miguel Montoya
La reforma constitucional en Formosa no solo exhibió la habilidad de Insfrán para eternizarse en el poder, sino también la fragilidad de una oposición que se vende al mejor postor. El caso Servín desnuda la obscena compraventa de conciencias y la miseria de una política que se alimenta de la necesidad.
Gildo Insfrán y su gabinete juran fidelidad a una Constitución presentada como moderna, mientras acumulan décadas en el poder. Ministros eternos, fiscal obediente y un Poder Judicial ausente consolidan una provincia donde los ciudadanos viven reducidos a un estatus de súbditos y la alternancia democrática es un espejismo.
Una auditoría en la ANSES de Clorinda destapó un esquema de jubilaciones irregulares otorgadas a paraguayos, con domicilios falsos y servicios inexistentes. Más que un fraude administrativo, la maniobra muestra cómo el “modelo formoseño” convierte los beneficios sociales en una maquinaria para importar votos y sostener al poder.
