
Fentanilo por encomienda: la frontera caliente de Formosa que el poder prefiere no mirar
Ampollas de fentanilo incautadas en Formosa: una droga 100 veces más potente que la morfina, cruzando la frontera en una encomienda
Ampollas de fentanilo incautadas en Formosa: una droga 100 veces más potente que la morfina, cruzando la frontera en una encomienda
Niños de primaria como decorado, militantes como público real y el recreo escolar como tribuna partidaria. Habló de paranoia política, denuncias delirantes sobre narcotráfico y una meritocracia distorsionada donde la pobreza es glorificada y la épica del “champion roto” ahora disfraza el cinismo de un hipermillonario que aún se presenta como vocero de los pobres.
Con la cantidad de nombres que tiró la legisladora en una entrevista a Radio Uno, ya casi tenemos el elenco completo de una narconovela federal. Solo falta que aparezca un submarino y Netflix firme la serie. No quedó muñeco con cabeza.
A partir de la falta de controles en Paraguay, las organizaciones criminales aprovechan para trasladar la cocaína que luego es llevada por ruta hasta los puertos de allí. El último paso es el envío en barco a Europa y otros mercados.
En una columna del periodista, Osvaldo Bazán, quedó expuesta la situación en el oeste formoseño, con intentendes que se apropian de la vida de todos en su pueblo y también son responsables impunes por sus muertes.
La policía de la provincia de Formosa no para de dar que hablar pero sus acciones solo responden una decisión política del gobierno de Insfrán de premiar a policías denunciados no solo por los excesos en la pandemia sino también por sus relaciones con el narcotráfico. Queda claro que la administración no premia a los mejores.
Los límites de la provincia con la república del Paraguay son virtualmente un colador y hay más de 500 kilómetros en toda la provincia sin los recursos humanos o logísticos para controlarlos.
La caja chica de Vialidad vuelve a abrirse con moño azul. Mientras Javier Milei brama en conferencias sobre la “casta política”, en Formosa su partido pacta con lo más rancio del aparato feudal. La salida forzada del ingeniero Víctor Padilla de la jefatura de Vialidad Nacional es un caso paradigmático: se va un funcionario que mantuvo operativa la estructura vial con escasos recursos y entra Hernán Ramis, un cuadro del gildismo reciclado por la vía rápida de la impunidad.
Ampollas de fentanilo incautadas en Formosa: una droga 100 veces más potente que la morfina, cruzando la frontera en una encomienda
Mientras la localidad enfrenta índices alarmantes de pobreza, falta de infraestructura y abandono sanitario, su intendente Adolfo Pérez promete “voto cautivo” para Gildo Insfrán y asegura que en Pozo del Mazo “todos viven dignamente”. El manual del servilismo institucional, en su versión más grotesca.
El intendente Mario Brignole juega al macho montado con rebenque en mano para amedrentar a la oposición, pero tiembla de miedo cuando el Ejército anuncia maniobras en su camping. Gaucho para agredir mujeres, pero cobarde cuando no controla los uniformes. La síntesis perfecta del modelo formoseño: bravuconería para los débiles, sumisión ante el poder real.
Los trasladan como ganado, pero les prometen libertad. Viajan en un camión volcador hacia un acto político, creyendo que participan de la democracia, cuando en realidad son piezas de un sistema perverso que los condena, una y otra vez, a votar por quienes los mantienen pobres, dependientes y callados. No es una movilización: es una humillación institucionalizada.